Es verano y me siento contrariado por los cambios tan radicales de
clime. Por un lado disfrutar todas las oportunidades que brinda el calor
como usar ropa cómoda, salir a un café a tomar una bebida fresca,
llevarse la laptop a un lugar lleno de árboles, salir con amigos tanto
de día como de noche al cine, a una bar o simpemente a bobear.
También el verano inspira a llevar lo que uno hace más allá de
algunas fotografías o de guardar bellos recuerdos en la memoria. Uno
quiere tomar todos los elementos para expresarse y hacer retrospectivas y
perspectivas. Por el deseo de repetir momentos maravillosos, retratar
momentos y lugares en la mente a manera de sucesos, y planear nuevas
actividades para buscar más momentos inolvidables.
Trabajar en las redes sociales ayuda mucho porque en cierta manera
ayuda a diseñar mapas, a visualizar. Y es muy lindo cuando esos momentos
observados se pueden visualizar y luego se pueden plasmar los
recuerdos.
Entonces, los perfiles pueden llenarse de color y haver que los
recuerdos permanezcan por más tiempo y los planes salgan mejor.
Coloridos intensos, sobre todas las cosas en este verano.
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